6/1/12

A 2 años del Asesinato de Josefina Reyes Salazar, no hubo, no hay y no habra Justicia en México.

"Me mató el gobierno": En memoria de la activista juarense Josefina Reyes Salazar

 Por GL

LOS ÁNGELES.- Josefina Reyes Salazar fue asesinada el 3 de enero de 2010. Su activismo por los derechos humanos empezó con la defensa de sus hijos en Guadalupe, Distrito Bravos, en el Valle de Juárez. Sus denuncias se extendieron en la región ante otros secuestros perpetrados por militares y la pusieron en la mira del peligro. Pero Josefina Reyes no guardó silencio.
El amor de madre y el coraje de mujer fueron su fórmula para exigir respeto y justicia por sus hijos y por los demás jóvenes que incriminaban sin fundamentos como parte de los grupos de narcotraficantes; incriminaciones que hacían lucir al gobierno de Felipe Calderón como “capaz de combatir el narcotráfico”, y la voz de Josefina Reyes retumbaba entre las paredes de cada instancia judicial, sin eco.
Durante el 2009, recibió varias amenazas de muerte. Puso las denuncias formales, pero en ese entonces no era noticia para los medios mexicanos, y los expedientes fueron alterados como el de tantas víctimas, vieja costumbre de la fiscalía.
Sólo la magnitud del descontento creció de manera contundente cuando se enteraron de su asesinato. Un tiro en la cabeza quitaría de tajo su vida, frente a un restaurante de la ciudad. Hubo testigos, hubo quién la vio jalonearse en defensa propia contra sus agresores. Hubo quién vio llegar una camioneta negra y un carro blanco compacto de donde se bajaron unos hombres. Hubo quién los describiera como “un grupo de cinco o seis hombres vestidos de militares, capuchas negras y armas largas” que intentaban llevársela, primero. Pero ella se defendió tan ferozmente que decidieron matarla ahí mismo.
Su hermana Marisela cuenta que siempre se quejaba de los militares. Decía que “esos cabrones, donde quiera te levantan”. Una vecina del Valle, le decía a Marisela, "para qué le buscan, mijita, si ya sabemos quiénes son". Josefina no sólo denunciaba las violaciones de derechos humanos de los militares en Juárez, también hablaba de complicidades de éstos con las bandas del narcotráfico. Sin embargo, nada hay claro. Las autoridades no investigaron, no investigan, no investigarán. La justicia es un imposible en México. A dos años de su asesinato, no hay una investigación abierta, ni un procesado. Josefina Reyes Salazar fue asesinada un 3 de enero en Juárez. Es lo único que se dice, y el miedo se vuelve silencio entre los desolados del Valle.