Hay que seguir el ejemplo de los Pobladores, cansados de las tropelias de delincuentes, hacen "Justicia por propia mano" y les aplican la "ley fuga" a Delincuentes.
Lunes 16 de Abril del 2012.
Izúcar de Matamoros, Pue.- Todo comenzó aproximadamente a las 22 horas del jueves, cuando la hija de un ganadero en la región viajaba con sus familiares en un vehículo Jetta verde por la avenida Dolores, cerca de la colonia El Arenal, en Pueblo Nuevo, municipio de Chietla. Ahí fueron interceptados por seis ocupantes de un carro Sentra blanco, los cuales bajaron a la muchacha y la subieron al vehículo interceptor.
Un reporte de la Procuraduría General de Justicia del Estado indica que a las 23 horas de ese día los familiares de la joven de 22 años acudieron al Ministerio Público de Izúcar de Matamoros a presentar la denuncia por privación ilegal de la libertad, que quedó asentada en la averiguación previa 605/2012/Izamat.
Alertados por los familiares por medio de radios de onda corta y telefonía celular, habitantes de Pueblo Nuevo y las rancherías aledaños cerraron los accesos y salidas a la comunidad hasta el viernes, cuando capturaron a tres de los presuntos plagiarios. A uno lo ubicaron en un Jetta rojo, a otro en el Sentra blanco, al tercero mientras caminaba.
Para la mañana del viernes, la Policía Estatal y la Ministerial de Puebla se sumaron a la búsqueda de los responsables y de la joven desaparecida, pero para entonces ya la mujer había sido rescatada por los vecinos en las inmediaciones de El Aguacate, en el municipio de Izúcar de Matamoros, y entregada a la Policía Municipal, que a su vez la devolvió a sus familiares, quienes la llevaron a una clínica para ser valorada.
A los tres presuntos raptores los condujeron por el camino de terracería, donde los llevaron a una casa; fueron amarrados de las manos y golpeados. Las policías Estatal y Ministerial, apoyadas por un helicóptero, realizaron la búsqueda de los delincuentes y de la víctima cuando se les notificó que los habitantes ya tenían detenidos a los plagiarios.
Los uniformados trataron de convencer a los vecinos de que entregaran a los captores, pero se negaron y comenzaron a golpearlos. A las 15 horas del viernes unas 300 personas hacían “justicia por su propia mano”.
Luego les aplicaron la “ley fuga”: les dijeron que corrieran, y si lograban escapar, quedarían libres. Dos de ellos hicieron caso y fueron abatidos a tiros por la espalda por pobladores que iban armados.
El tercero no corrió, se quedó ahí, pero recibió una paliza y luego fue entregado a los agentes ministeriales de la Procuraduría General de Justicia, a quienes los vecinos les pidieron “no meterse” en la decisión de hacer justicia por cuenta propia, y así lo hicieron: sólo se limitaron a observar a la distancia; mientras los pobladores trajeron un trascavo con el cual pretendían hacer un hoyo para enterrar ahí los cuerpos de los presuntos delincuentes, pero fue hasta las 18 horas aproximadamente cuando los pobladores accedieron a entregar los cadáveres a la Policía Estatal, la cual se los llevó hasta el anfiteatro de Izúcar de Matamoros para que se les practicara la necropsia. El herido fue internado en el Hospital General del Sur de la capital poblana.
La acción de los habitantes de comunidades y rancherías del camino que une a los municipios de Atzala, Chietla, Izúcar de Matamoros, Tehitzingo y el resto de esta parte de la Mixteca poblana no se limitó ahí. La mañana de este sábado, en San Pedro La Junta, municipio de Tehuitzingo, capturaron a otros dos integrantes de la banda, integrada por seis secuestradores.
Ningún vecino de la región ha sido detenido hasta ahora por estos hechos, aunque fueron enviadas patrullas de la Policía Estatal y unidades del Ejército mexicano, a las que este sábado se les vio circular por la carretera Izúcar de Matamoros–Acatlán de Osorio.
Trascendió que la banda operaba en la región de Izúcar de Matamoros; cuando se les interrogó habrían dicho que pretendían secuestrar a otras dos jovencitas de la zona. Uno se encuentra prófugo.
Algunos vecinos relataron que esto es sólo el principio y que esperan que más poblados “sigan el mismo ejemplo”, pues sólo así los delincuentes “van a entender que no se deben meter con la gente y para que aprendan a respetar lo poco que tenemos”.
Los sujetos a quienes les aplicaron la llamada “ley fuga” respondieron a los nombres de Miguel Ángel López Silva, de 20 años de edad, y Hugo García Ramírez, de 33 años, ambos originarios de Raboso, una junta auxiliar del municipio de Izúcar de Matamoros.
El sujeto linchado respondió al nombre de Crisóforo Mejía Hernández, de 42 años de edad. Mientras, los heridos se encuentran graves en el Hospital General del Sur, en la capital del estado, pero las autoridades se han reservado revelar sus nombres.
● La postura de la PGJ
Aunque la tarde del viernes la Procuraduría General de Justicia comenzó a difundir que fue gracias a la intervención de esta dependencia que se logró la localización y rescate de la mujer plagiada, lo cierto es que los agentes de la dependencia poco pudieron hacer en esta tarea.
La PGJ, así como la Policía Estatal de Puebla, desplegaron decenas de unidades con agentes a la zona, incluido un helicóptero, pero fueron los pobladores de las rancherías de la Mixteca quienes, armados y enardecidos, impidieron que los policías intervinieran en las ejecuciones y el linchamiento de los presuntos secuestradores.
La dependencia estatal envió un escueto comunicado en el que da su versión de los hechos, siendo hasta ahora la única postura oficial desde hace tres días, el cual concluye de esta forma: “A través de una operación conjunta entre la Procuraduría General de Justicia con apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal, se efectuó la búsqueda y localización de la mujer, logrando su liberación. El saldo fue de dos presuntos secuestradores muertos y uno más detenido. La Procuraduría General de Justicia ampliará la información en torno al tema según las investigaciones lo permitan”.
Lunes 16 de Abril del 2012.
Izúcar de Matamoros, Pue.- Todo comenzó aproximadamente a las 22 horas del jueves, cuando la hija de un ganadero en la región viajaba con sus familiares en un vehículo Jetta verde por la avenida Dolores, cerca de la colonia El Arenal, en Pueblo Nuevo, municipio de Chietla. Ahí fueron interceptados por seis ocupantes de un carro Sentra blanco, los cuales bajaron a la muchacha y la subieron al vehículo interceptor.
Un reporte de la Procuraduría General de Justicia del Estado indica que a las 23 horas de ese día los familiares de la joven de 22 años acudieron al Ministerio Público de Izúcar de Matamoros a presentar la denuncia por privación ilegal de la libertad, que quedó asentada en la averiguación previa 605/2012/Izamat.
Alertados por los familiares por medio de radios de onda corta y telefonía celular, habitantes de Pueblo Nuevo y las rancherías aledaños cerraron los accesos y salidas a la comunidad hasta el viernes, cuando capturaron a tres de los presuntos plagiarios. A uno lo ubicaron en un Jetta rojo, a otro en el Sentra blanco, al tercero mientras caminaba.
Para la mañana del viernes, la Policía Estatal y la Ministerial de Puebla se sumaron a la búsqueda de los responsables y de la joven desaparecida, pero para entonces ya la mujer había sido rescatada por los vecinos en las inmediaciones de El Aguacate, en el municipio de Izúcar de Matamoros, y entregada a la Policía Municipal, que a su vez la devolvió a sus familiares, quienes la llevaron a una clínica para ser valorada.
A los tres presuntos raptores los condujeron por el camino de terracería, donde los llevaron a una casa; fueron amarrados de las manos y golpeados. Las policías Estatal y Ministerial, apoyadas por un helicóptero, realizaron la búsqueda de los delincuentes y de la víctima cuando se les notificó que los habitantes ya tenían detenidos a los plagiarios.
Los uniformados trataron de convencer a los vecinos de que entregaran a los captores, pero se negaron y comenzaron a golpearlos. A las 15 horas del viernes unas 300 personas hacían “justicia por su propia mano”.
Luego les aplicaron la “ley fuga”: les dijeron que corrieran, y si lograban escapar, quedarían libres. Dos de ellos hicieron caso y fueron abatidos a tiros por la espalda por pobladores que iban armados.
El tercero no corrió, se quedó ahí, pero recibió una paliza y luego fue entregado a los agentes ministeriales de la Procuraduría General de Justicia, a quienes los vecinos les pidieron “no meterse” en la decisión de hacer justicia por cuenta propia, y así lo hicieron: sólo se limitaron a observar a la distancia; mientras los pobladores trajeron un trascavo con el cual pretendían hacer un hoyo para enterrar ahí los cuerpos de los presuntos delincuentes, pero fue hasta las 18 horas aproximadamente cuando los pobladores accedieron a entregar los cadáveres a la Policía Estatal, la cual se los llevó hasta el anfiteatro de Izúcar de Matamoros para que se les practicara la necropsia. El herido fue internado en el Hospital General del Sur de la capital poblana.
La acción de los habitantes de comunidades y rancherías del camino que une a los municipios de Atzala, Chietla, Izúcar de Matamoros, Tehitzingo y el resto de esta parte de la Mixteca poblana no se limitó ahí. La mañana de este sábado, en San Pedro La Junta, municipio de Tehuitzingo, capturaron a otros dos integrantes de la banda, integrada por seis secuestradores.
Ningún vecino de la región ha sido detenido hasta ahora por estos hechos, aunque fueron enviadas patrullas de la Policía Estatal y unidades del Ejército mexicano, a las que este sábado se les vio circular por la carretera Izúcar de Matamoros–Acatlán de Osorio.
Trascendió que la banda operaba en la región de Izúcar de Matamoros; cuando se les interrogó habrían dicho que pretendían secuestrar a otras dos jovencitas de la zona. Uno se encuentra prófugo.
Algunos vecinos relataron que esto es sólo el principio y que esperan que más poblados “sigan el mismo ejemplo”, pues sólo así los delincuentes “van a entender que no se deben meter con la gente y para que aprendan a respetar lo poco que tenemos”.
Los sujetos a quienes les aplicaron la llamada “ley fuga” respondieron a los nombres de Miguel Ángel López Silva, de 20 años de edad, y Hugo García Ramírez, de 33 años, ambos originarios de Raboso, una junta auxiliar del municipio de Izúcar de Matamoros.
El sujeto linchado respondió al nombre de Crisóforo Mejía Hernández, de 42 años de edad. Mientras, los heridos se encuentran graves en el Hospital General del Sur, en la capital del estado, pero las autoridades se han reservado revelar sus nombres.
● La postura de la PGJ
Aunque la tarde del viernes la Procuraduría General de Justicia comenzó a difundir que fue gracias a la intervención de esta dependencia que se logró la localización y rescate de la mujer plagiada, lo cierto es que los agentes de la dependencia poco pudieron hacer en esta tarea.
La PGJ, así como la Policía Estatal de Puebla, desplegaron decenas de unidades con agentes a la zona, incluido un helicóptero, pero fueron los pobladores de las rancherías de la Mixteca quienes, armados y enardecidos, impidieron que los policías intervinieran en las ejecuciones y el linchamiento de los presuntos secuestradores.
La dependencia estatal envió un escueto comunicado en el que da su versión de los hechos, siendo hasta ahora la única postura oficial desde hace tres días, el cual concluye de esta forma: “A través de una operación conjunta entre la Procuraduría General de Justicia con apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal, se efectuó la búsqueda y localización de la mujer, logrando su liberación. El saldo fue de dos presuntos secuestradores muertos y uno más detenido. La Procuraduría General de Justicia ampliará la información en torno al tema según las investigaciones lo permitan”.