El abogado Gerardo Ortega Maya denuncia que está preso por negarse a declarar que Tomás Ángeles Dauahare tenía vínculos con el narco. El plan –señala– se gestó desde la PGR y la Sedena
Jueves 9 de mayo de 2013
"Tú firmas la declaración en contra del general Dauahare y te vas a tu casa, el pleito no es contigo, es con el general, le vamos acabar su carrera por órdenes del general Galván Galván”
sobre quienes lo torturaron
La testigo colaboradora refiere que el 27 de diciembre de 2011, por ejemplo, le entregó 20 mil dólares a Gerardo Ortega Maya como pago de sus servicios
"Háblale al general”, alcanzó a gritar a su esposa el abogado Gerardo Ortega Maya antes de ser detenido por un grupo de encapuchados de la PGR y el Ejército.
Se refería a su amigo, el general Tomás Ángeles Dauahare. Ortega Maya fue detenido y se lo llevaron de su casa en Huixquilucan. De paso, los encapuchados también saquearon la vivienda.
A un año de su captura sigue internado en el Cefereso número 3 noreste de Matamoros, Tamaulipas.
Los cargos son negarse a declarar que Ángeles Dauahare tenía vínculos con el narcotráfico.
La Procuraduría General de la República (PGR) entonces a cargo de Marisela Morales Ibáñez, acusó a Ortega Maya, a partir de la declaración de Esther Yadira Huitrón Vázquez, con nombre clave de testigo protegido “Libre”, de que Ángeles trabajaba para la organización de “Los Cabrera Sarabia”, célula que opera en Durango del cártel de Sinaloa de Joaquín “el Chapo” Guzmán.
El uso y abuso de la figura de testigo protegido fue una de las herramientas que más uso Marisela Morales al frente de la PGR para incriminar.
“Tú firmas la declaración en contra del general Dauahare y te vas a tu casa, el pleito no es contigo, es con el general, le vamos acabar su carrera por órdenes del general Galván Galván”, le advirtieron al abogado.
Pese a la tortura, el abogado se negó a declarar lo que pedían y hoy permanece en prisión como parte de un entramado ideado desde la Procuraduría General de la República (PGR) que presidía Marisela Morales Ibáñez y del entonces secretario de la Defensa Nacional, Guillermo Galván Galván, según acusa Ortega Maya.
Él es yerno de Luis Carlos Ruano Angulo, exsecretario de la Marina Armada de México. Su esposa es Mariana Paola Ruano Maldonado, quien atestiguó la captura en su casa de Huixquilucan, estado de México.
La mujer fue testigo de las irregularidades de su detención, hechos por los que presentó la denuncia ante la Procuraduría General de Justicia del Estado de México, según la carpeta de investigación 483340830033312.
Esther Yadira Huitrón Vázquez, alias “Libre”, asegura haber trabajado para los hermanos “Cabrera Sarabia” del Cártel de Sinaloa, y en sus declaraciones afirma que Ortega Maya tenía la función de comprar información relacionada con las averiguaciones previas que se integraban contra los miembros de la organización .
“Hacerla llegar a los líderes de la referida empresa antisocial, logrando con ello evitar que al realizarse diligencias como cateos, la representación social de la federación lograra la localización de pruebas incriminatorias, por haber sido destruidas con anterioridad”, refiere la acusación de la PGR contra Ortega Maya, en poder de Reporte Indigo.
El relato de ‘Libre’
La testigo colaboradora, asegura que trabajó para la célula criminal Cártel del Pacífico cuyo líder es Joaquín Guzmán Loera, alias “El Chapo Guzmán” y para los “Cabrera Sarabia”, que operan en el estado de Durando y cuyo líder fue Felipe Cabrera Sarabia, alias “El señor”, “El inge”, “El Santa Ana” o “El señor de la Sierra”, detenido por la Siedo.
“Libre” refirió que los “Cabrera Sarabia” operan desde el 2003 traficando marihuana y cocaína, secuestrando y “levantando” gente de otras organizaciones enemigas en el estado de Durango.
Dice que cuando trabajó para ellos desempeñaba la función de conseguir y ubicar contactos de gente colocada en puestos clave de la SIEDO, hoy SEIDO de la PGR; el CISEN, y el Ejército Mexicano, a fin de ofrecerles dinero a cambio de colaborar con los Cabrera Sarabia.
El papel de “Libre” era ubicar a servidores públicos que, a cambio de fuertes sumas de dinero, se comprometieran a entregar copias de las averiguaciones previas, órdenes de aprehensión o cateos dirigidos a detener o encarcelar a miembros de este grupo criminal.
Fue así que tras la detención de Carlos Moreno Flores, alias “La calentura”, se le ordenó contactar gente que entregara información acerca del proceso judicial en su contra.
Asimismo, “Libre” se encargó de contactar a personal de la PGR que opera el Centro de Arraigos, ubicado en la colonia Doctores del DF, para entregarles dinero a cambio de dejar pasar ropa, comida y celulares a integrantes de ese grupo detenidos en operativos.
Según el relato que “Libre” vertió ante las autoridades, conoció al abogado Gerardo Ortega Maya, quien acepto pasar toda la información sobre la investigación de Carlos Moreno, alias “La calentura”, que llevaba la Siedo. Esta información incluía cateos y nombres de las personas involucradas en la indagatoria.
Una de las supuestas reuniones entre esta mujer y Ortega Maya, habría ocurrido en el restaurante Wings de Villa Coapa.
“Cuando llegamos él me preguntó: ¿Qué tan pesado es ese cabrón de Carlos Moreno Flores, alias El calentura?” dice en los documentos que consignan la declaración de “Libre”.
A decir de “Libre”, el abogado Ortega Maya le manifestó en aquel encuentro que los familiares de “La Calentura” lo habían amenazado con que, en caso de que no cumpliera, le harían daño.
También le habría dicho Ortega Maya que acababa de hacer exámenes en la PGR para ser el jefe que regula a los “yanquis” a nivel nacional.
“Quiero señalar que considero que todo lo que me dijo nunca dudé, porque toda la información que me proporcionó coincidía, específicamente porque cuando iban a catear las propiedades de Carlos Moreno Flores, alias “La Calentura”, me informó antes de que se realizaran, entre ellos lo que se llevaron en Santa Fe y en la colonia Nápoles, Distrito Federal; en Chapala, Jalisco y Chiapas.