3/10/12

Luis Videgaray. RIM: EL TODOPODEROSO.




Lo llaman “El Doctor” y es el alter ego del próximo presidente 
de México. Formado más en la academia que en la política, 
será sin duda el personaje con más influencia del próximo 
sexenio. Conócelo
 


Atrás de los presidentes siempre hay un personaje  de confianza –hombre o mujer- capaz de ser factor de decisión en el rumbo de un país. 
En él o en ella se deposita el poder casi absoluto, pero también la intriga y la envidia por tener derecho de picaporte con la más alta esfera.
La polémica es el terreno que pisan diariamente estos hombres y mujeres tras y con ello poner a prueba sus capacidades. Es su pan de cada día.
Como diputado al frente de la Comisión de Presupuesto, emitió un reglamento contra la pasarela y el famoso “besamanos”. No fue del agrado de todos, pero con eso dio las primeras muestras de su personalidad
Se dio a conocer como una figura pública que contrarrestaba a los demás secretarios de finanzas de los Estados en el país
Ahí, en ese lugar, está desde hace tiempo Luis Videgaray: “El Doctor”, y sin duda la mano derecha del presidente electo Enrique Peña Nieto. 
Formado más en la academia que en el ámbito político, desde 2005 es el hombre de toda la confianza del próximo inquilino de Los Pinos.
Actualmente es el coordinador general del equipo de transición que han prometido será diferente al de los anteriores sexenios panistas. 
Videgaray fue el encargado de presentar ante un auditorio atiborrado de políticos y prensa la primera iniciativa del nuevo gobierno al Congreso.  
Era el proyecto para dotar de mayores facultades el Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (IFAI).
Economista de formación, pertenece al reducido grupo de mexicanos que logran estudiar en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT por sus siglas en inglés) en donde obtuvo su doctorado en 1998 con la tesis: La respuesta fiscal a los choques petroleros. 
El asesor de su tesis fue el economista James. M Poterba, un destacado economista estadounidense especializado en la afectación de la imposición de impuestos en las economías de los países.
De ahí que Videgaray sea ampliamente conocido en el mundo académico en Estados Unidos y en otras partes del mundo. Es la carta de presentación de lo que los priistas insisten en presumir como el nuevo PRI.
Credenciales priistas
En la década de los 90, durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari y siendo todavía estudiante, Luis Videgaray trabajó como asesor del Secretario de Hacienda, Pedro Aspe Armella. 
Antes de entrar de lleno al mundo de la política en el Estado de México, durante el gobierno de su amigo Peña Nieto, colaboró también en Protego, una empresa privada del ex secretario salinista.
Desde ahí fue enviado por Aspe a buscar fórmulas que resolvieran el problema de deuda pública que heredaba la administración mexiquense de Arturo Montiel.
Su buen desempeño le valió que el sucesor, Enrique Peña Nieto, lo designara su secretario de Finanzas.
En ocasiones incluso la presencia de Videgaray ha llegado a eclipsar la imagen del mexiquense. Se le considera el verdadero autor del libro “México, la gran esperanza”.
La periodista Lydia Cacho reveló en su cuenta de Twitter, en febrero de este año, que contaba con información de que Videgaray era el verdadero autor.
Como esto, en otros aspectos de la campaña presidencial y  ahora en el proceso de transición, se le considera el autor intelectual de la mayoría de los proyectos que ha lanzado Peña Nieto. 
Es un asiduo usuario de las redes sociales. Su cuenta de Twitter tiene 109 mil 506 seguidores, y fue a través de ese medio que provocó uno de los episodios más polémicos en su paso por la Cámara de Diputados.
A finales de septiembre del 2010 sacó una foto de su entonces compañero diputado del Partido del Trabajo, Oscar González Yáñez, dormido en plena sesión y la subió a Twitter.
La foto provocó polémica y en tribuna el legislador balconeado pidió la renuncia de Videgaray porque con sus actos afectaba la buena convivencia entre legisladores.
“Al Congreso se viene a trabajar y no a dormir”, fue la respuesta. Quizás ya desde entonces sabía que sería el hombre detrás del trono.
Rápido ascenso 
“El Doctor” tiene una carrera de apenas siete años con exposición total a los medios y a la vida pública. Sus años como asesor fueron tras bambalinas, pero desde que entró a la administración del Estado de México, todo cambió.
Esto lo hace diferente a la mayoría de los priistas que tienen décadas en la política y van y vienen a los cargos públicos y de elección popular.
Desde el inicio de la gestión de Peña Nieto en el Estado de México, en 2005, Videgaray ocupó el cargo de Secretario de Finanzas en el Estado. 
En febrero del 2009, cuando estaba a punto de dejar su cargo como encargado de la economía del Edomex, la revista Latin Finance le otorgó a la entidad el premio “Deal of the Year”, por la renegociación que hizo Videgaray de la deuda pública.
Así se dio a conocer como una figura pública que contrarrestaba a los demás secretarios de finanzas de los Estados en el país. Ya para entonces era consejero directo de Peña Nieto, quien también desde esas fechas era el favorito para la sucesión presidencial.
Esto le valió que llegara a la Cámara de Diputados, por la vía plurinominal, como el principal prospecto para ocupar la presidencia de la Comisión de Presupuesto, que es la más cotizada en cada legislatura. Ahí se negocian y asignan las partidas presupuestales a los estados.
Durante su gestión al frente de esta Comisión Videgaray cambió la forma en que tradicionalmente se utilizaba ese cargo. Su contacto con los medios fue escaso y cuidó en todo momento que no se filtrara información por adelantado para evitar problemas.
Implementó un reglamento para el Presupuesto de Egresos 2011 a fin de evitar la presencia de los gobernadores en el pleno de la Comisión, y en lugar de eso recibir archivos con la información de los proyectos que requería cada Estado.
Antes la liturgia era que cada mandatario asistiera, hablara sobre sus necesidades y luego diera un festín con comida típica de su Estado y bebida para todos los integrantes de la comisión.
“El Doctor” acabó con ese ritual, poniendo reglas claras para evitar la pasarela y el famoso “besamanos”. No fue del agrado de todos, pero con eso dio las primeras muestras de tener una personalidad fría y seria.
Sin embargo no todo salió como él esperaba y el reglamento pasó en varias ocasiones a ser un legado de buenas intenciones, pues no faltó el gobernador que realizó comida y tuvo que ser recibido por la Comisión de Presupuesto.
Otro de los cambios que realizó fue el trabajar a puerta cerrada solo con los secretarios de la Comisión de Presupuesto, para llegar a la sesión con la mayor parte del proyecto “planchado” y poder votarlo con facilidad.
A pesar de la oposición, los dos presupuestos en los que estuvo a cargo se dieron con tranquilidad, y por parte de todos los partidos hubo conformidad en los términos en los que fue repartido el dinero.
Fue gran aliado del PAN para apoyar el presupuesto de la estrategia de seguridad, sin embargo establecieron reglas claras dentro del decreto para transparentar el gasto del dinero a través de informes trimestrales. 
El 2010 fue el primer año en que se obligaban estos informes, pero los resultados no fueron positivos; el segundo año la redacción fue más rigurosa pero nuevamente el gobierno federal evadió esta responsabilidad.
Desde esos meses todos sus compañeros aseguraban que sería el próximo Secretario de Hacienda.
Estratega político
Con una corta carrera en cargos públicos de primer nivel, Luis Videgaray carecía de experiencia como estratega. Su brinco de la academia a las asesorías en diferentes secretarías siguió siendo trabajo de escritorio.
La Secretaría de Finanzas y la Comisión de Presupuesto fueron cargos ejecutivos entrelazados con decisiones políticas en donde el fogueo fue intenso y conoció de las argucias de la política para influir en las decisiones de las cúpulas y del electorado.
Él nunca ha competido en una elección, su diputación federal fue plurinominal, y paradójicamente hoy una de las propuestas de su jefe Enrique Peña Nieto es desaparecer 100 del total de legisladores que llegan por esta vía.
Se le mencionó entre los aspirantes a suceder en el cargo a Peña Nieto en el Estado de México, pero en realidad el hoy presidente electo tenía planes diferentes para él.
A finales de marzo del 2011 solicitó licencia a su cargo para coordinar la campaña de Eruviel Ávila. Aunque el ex alcalde de Ecatepec no era el preferido de Peña Nieto, el gobernador tuvo que aceptar que fuera el candidato, y logró posicionar a Videgaray en el cargo de mayor importancia. 
Fue apenas el calentamiento para un encargo mayor, pues luego le asignaron coordinar la campaña a la presidencia de la república. En ambos casos con resultados positivos.
A pesar de su corta experiencia en el mundo electoral, junto el equipo que hizo con Miguel Osorio Chong, Jorge Carlos Ramírez Marín, y en Comunicación Social, David López, lograron sortear momentos difíciles como el rechazo de los estudiantes de la Universidad Iberoamericana, el 11 de mayo del 2012, de donde nació el movimiento Yo Soy 132.
Toreó y embistió aguerridos debates en el programa de la periodista Carmen Aristegui, contra Ricardo Monreal, representante de Andrés Manuel López Obrador.
Se le acusó de triangular dinero del Estado de México a la campaña electoral y de ser artífice de la compra del voto mediante tarjetas del supermercado Soriana. 
De todas, mal o bien, salió adelante. Las autoridades electorales, en un acto altamente cuestionado, no dieron validez a las denuncias.
Para conocer a Luis Videgaray
Su familia y personalidad
— Nació en México, DF el 10 de agosto de 1968
— Es el mayor de 3 hermanos, su padre falleció cuando él tenía 11 años.
— Está casado con Virginia Gómez del Campo, tienen 3 hijos: Luis, Virginia e Isabel.
— Le gusta el Futbol americano, es aficionado a los Steelers 
— Sus comidas favoritas son los tacos, el chocolate oscuro y la pasta
Estudios
— Se graduó de Economía en el ITAM con la tesis “Fallas del mercado, regulación e incentivos: el caso de la privatización de los puertos mexicanos”. 
— Es doctor en Economía con especialidad en Finanzas Públicas por el MIT con la tesis “The Fiscal Response to Oil Shocks” (La respuesta fiscal a los choques petroleros).
— Fue profesor del ITAM y la Universidad Iberoamericana.
Experiencia
— Es Miembro del Partido Revolucionario Institucional desde 1987.
— Fue asesor del secretario de Hacienda y Crédito Público Pedro Aspe Armella (1992-1994).
— Asesor del secretario de Energía, Jesús Reyes Heroles (1996). 
— Director de Finanzas Públicas de la empresa Protego Asesores, propiedad de Pedro Aspe Armella (2001-2005). 
— Secretario de Finanzas, Planeación y Administración del Gobierno del Estado de México (2005 - 2009).
— Coordinador nacional de los secretarios de Finanzas estatales (2008-2009)
— Diputado federal durante la LXI Legislatura. Fungió como presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública (2009 - 2011)
— Coordinador general  de la campaña a gobernador de Eruviel Ávila Villegas.
— Delegado especial en funciones del presidente del PRI en el Estado de México (2011)
— Coordinador general de la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto (2012)
— Nombrado coordinador general de la Transición Gubernamental por Peña Nieto (2012)
Los dueños del picaporte presidencial
En su momento, estos personajes influyeron en el ánimo presidencial. Algunos lo hicieron en los reflectores y otros desde las sombras, pero su mano siempre se sintió en muchas de las decisiones del primer mandatario.
— Emilio Gamboa
Presidente Miguel de la Madrid
Emilio Gamboa se inscribió en el Revolucionario Institucional desde 1972, manteniéndose por tres décadas en distintos cargos de la administración pública.
Fue secretario particular de Miguel de la Madrid y factor clave para abrir las puertas del despacho presidencial al entonces secretario de Programación y Presupuesto, Carlos Salinas de Gortari.
Sus favores fueron recompensados al ser designado por Salinas como director general del Infonavit, director de la Lotería Nacional y Secretario de Comunicaciones y Transportes.
Hoy es el jefe de la bancada del PRI en el Senado.
— José María Córdova Montoya
Presidente Carlos Salinas de Gortari
José María Córdova Montoya fungió como asesor del gobierno de Carlos Salinas de Gortari. Este personaje fue uno de los impulsores del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
De origen francés pero nacionalizado mexicano, fue considerado el segundo al mando durante la presidencia de Salinas, promoviendo las políticas económicas neoliberales.
Durante los últimos días de su sexenio, llegó como representante de México en el Banco Interamericano de Desarrollo con la ayuda del presidente Salinas.
Hoy es asesor y consultor de distintas corporaciones mexicanas y extranjeras.
— Liébano Sáenz
Presidente Ernesto Zedillo
Se graduó en Derecho en la UNAM, además de obtener el grado licenciatura en Ciencias Políticas por la Universidad de Texas.
Fue secretario particular de Ernesto Zedillo y aunque se mantuvo fuera de los reflectores, se le consideró como el secretario de Gobernación de facto.
De Sáenz se dijo que sacaba adelante las políticas económicas que Zedillo no sabía enfrentar, además de que el presidente le confiaba plenamente la agenda nacional.
Hoy es asesor político y consultor de imagen de políticos y empresarios. Jugó un papel crucial en la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto.
— Marta Sahagún
Presidente Vicente Fox
Antes de conocer a Vicente Fox en 1995, había contendido por la alcaldía de Celaya, Guanajuato. Ese mismo año el ex mandatario la nombró vocera durante su gubernatura en la entidad. 
En el 2000 se convirtió en vocera de la Presidencia, desde donde llegó a convertirse en primera dama. Desde esa posición operaba políticas estratégicas, como la relación personalisima que sostenía con Elba Esther Gordillo, Televisa y TVAzteca.
Se dijo que intentó por todos los medios ser la sucesora de su esposo en la Presidencia.
Hoy despacha en el Centro Fox, en San Cristóbal.
— Juan Camilo Mouriño
Presidente Felipe Calderón
Graduado de la Universidad de Tampa, fue diputado del Congreso de Campeche en 1997. 
Afiliado panista, intentó llegar al gobierno de Campeche en 2003, pero fue derrotado por Fernando Ortega.
La derrota lo acercó a Felipe Calderón, entonces Secretario de Energía, quien lo volvió su asesor.
Fue nombrado Jefe de la Oficina de la Presidencia cuando Calderón se convirtió en mandatario en 2006, y pasó a ser secretario de Gobernación dos años después, en sustitución de Francisco Ramírez Acuña. 
Un trágico accidente terminó en 2008 con la carrera del joven político que era un auténtico poder tras el trono.
The Wall Street Journal
El pasado mes de abril el periódico The Wall Street Journal publicó una nota firmada por el corresponsal en México, David Luhnow, en la que ensalzaba la preparación académica y técnica de Luis Videgaray.
De acuerdo al reporte periodístico en una reunión con inversionistas, realizada a finales del año pasado, Peña Nieto no llegó con una pléyade de acompañantes, como suelen hacerlo muchos políticos.
Solo iba con él su hombre de confianza. Al intercambiar opiniones Videgaray dio muestra de su conocimiento de la situación económica en el mundo y de las alternativas que pueden aplicarse en México.
Más que Peña Nieto fue Luis Videgaray “la verdadera estrella” en esa reunión, asegura Luhnow. Destaca además que al abrir su cuenta de Twitter el presidente Felipe Calderón siguió inmediatamente al hombre fuerte de Peña Nieto.
“Un economista de Wall Street que escribe un boletín que se publica dos veces a la semana dijo que Videgaray hizo preguntas detalladas sobre temas que el economista había cuestionado durante el último año. Había hecho su tarea, lo cual no ocurre con muchos funcionarios mexicanos últimamente”, detalla la nota.
De acuerdo con la publicación, para los que estuvieron en el encuentro ya hay señales claras de las ideas de Videgaray en las propuestas de Peña Nieto, entre ellas la apertura al financiamiento privado en Pemex.